No demores delicia mía,
porque la pasión
no espera por la luz del día
Te cubriré con la piel de mi cuerpo ardiente
para que descanses en el infierno de mi vientre
No demores delicia mía,
porque la pasión
no espera por la luz del día
Porque sin tus ardores es intenso el frío
y mis delirios caen en el vacío
No demores delicia mía,
porque la pasión
no espera por la luz del día
Pues la nostalgia se ha vuelto inaguantable
por la tibieza de tu cuerpo inolvidable
No demores delicia mía,
porque la pasión
no espera por la luz del día
En esta locura en que muero cada día
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