¿Que si te amo?
Por supuesto que te amo.
¿Que si yo te hago bien?
Por supuesto que te hago bien.
¿Que si tú me haces bien?
Estando a tu lado
cada día muero un poco.
Ya no se quién soy,
no se qué quiero y
no se dónde voy.
Tus confesiones bajo el
manto oscuro me duelen
demasiado. Son como
latigazos en mi cuerpo
desnudo. Como perder
mi inocencia cada día.
Eres un castigo con sabor
a miel en la boca y
cicuta en el vientre.
Cicuta que me envenena,
pero no me mata; todavía
y me obliga a agonizar
en cada momento
que tus ojos me miran,
porque lo hacen con amor.
¡Inocente de ti que no sabes
cuánta amargura trajiste
a mi vida!
¡Inocente de mí que no se
cuánta amargura, aún me traerás!
No hay comentarios:
Publicar un comentario